viernes, 15 de enero de 2010

Avatar

Avatar-Teaser-Poster

O lo que es igual: Cuando crecieron los Pitufos para vencer a Gargamel

Lo se. Es poco original usar como referencia a los pitufos, aquellos semi-adorables duendes (o creaturas o animales o algo que respira) con los felinos alienígenas de Avatar, pero es algo difícil de resistir.

He visto Avatar dos veces ya. En 3D y en 2D, si he de llamarle de algún modo al cine convencional, y para hacer una historia larga corta, la película es altamente recomendable sobre todo si uno la ve en 3D.

Difícilmente puedo decir que la historia es original. Nada más lejano de la realidad, los recuerdos de “El último samurai” y “Danza con lobos” revolotean todo el tiempo al recordar la trama; la fuerza Jedi es parecida a la todopoderosa Eywa, con todo y su hojarasca, y que lo humanos vayan a destruir algo que no les pertenece es noticia vieja y a nadie sorprende. En muchas ocasiones, de todas las razas intergalácticas, somos lo malos. El hecho que la historia no sea del todo original en su origen, no significa que la película sea aburrida; al contrario, manda su mensaje ecologista de buena manera y la esperanza al final se hace presente. Segunda parte te veo venir, te veo venir.

Los actores se mezclan a la perfección con sus avatares, puedes verlos en ellos y en ningún momento sientes estar viendo una caricatura. Las emociones son transmitidas de manera efectiva por lo títeres digitales de James Cameron, el director del filme. Como la historia es hasta cierto punto predecible una vez que la agarras, la presencia de los actores en pantalla se encarga de mantenerte preocupado por ellos y por sus causas. Sigurney Weaver trabajó en Aliens (la segunda parte de Alien) con James Cameron y sigue siendo igual de buena en los papeles de mujer fuerte. Sam como-se-apellide es lo que parece la nueva adquisición venida de Australia para Hollywood y según veo no tarda en tener su cereal y su línea de tenis, porque sus figuritas de acción ya se venden en las jugueterías y tiendas departamentales puesto que el es uno de los terminators de la recien estrenada nueva cinta Terminator: Salvation. Sin embargo y a pesar que estas personas, así como el antagonista Giovanni Ribisi y Stephen Lang, hacen un papel bueno/adecuado, desde mi personal y humilde punto de vista la verdadera estrella de esta cinta es Pandora, el planeta. Y no existe en la vida real. Eso es realmente triste.

Hacer que un protagonista sea totalmente digital es una cosa, hay muchos ya a estas alturas. Ahora, que los protagonistas sean dos o tres y que todos sean creíbles, es más complicado y aun así ya hay algunos ejemplos (Señor de los anillos y tus batallas masivas, te estoy hablando a ti); pero hacer que un planeta entero exista de manera creíble, de lo general a lo particular, de la manera en que lo que hace Pandora es otra. Cuando te pones los lentes 3D y los científicos hacen la primera excursión a las selvas, te ves envuelto en el color y el ambiente de ese ecosistema. La lluvia, los animales, los ruidos, sus montañas flotantes, la manera en que el viento hace que las hojas se muevan, las especies animales tan increíbles como su hábitat. Todo en general es espectacular. Las casi tres horas que dura la película pasan desapercibidas ante la majestuosidad de los escenarios y los detalles en el cuarto de control de la compañía minera humana.

Definitivamente una película que va a ser desde ya una referencia para futuros efectos especiales. Lo siento 2012 (la pelicula), ya no eres el Rey de FX.

Véanla, no se van a arrepentir.

Yo le doy 4 estrellas de 5

lunes, 11 de enero de 2010

Y aquí vamos de nuevo 2010

 

El año nuevo ha comenzado. De manera oficial con bombo, platillo, fuegos artificiales, comida, bebida, rituales y todo lo que uno pueda imaginarse para de manera explicita y clara marcar un antes y un después al inicio del 2010; bueno, en realidad eso lo hacemos al inicio de cada año. Nos disponemos a escribir, aunque sea de manera mental, los propósitos para este año. Revisaremos cuales no cumplimos de la lista pasada y replantearemos nuestro curso, en el mexicanísimo ciclo de: Plantear, medio intentar, no cumplir.

No pondré aquí mi lista de propósitos porque es algo que considero no es de interés del público en general. Me resulta difícil imaginar a alguien desconocido para mi sumido en la oscura infelicidad durante todo el año porque no se enteró si mi propósito para este año era aprender a bailar salsa o hacerme ovo-lacto-vegetariano. Puedo mencionar sin embargo que los típicos propósitos de hacer dieta, aprender inglés, dejar de fumar y parecidos nunca los incluyo en mi lista.

¿Por qué hacemos propósitos cada año? O replanteando la pregunta ¿Por qué la gente que hace propósitos los hace? ¿Cuál es el motivo que nos lleva a hacerlo? Dejaré las respuestas a estas preguntas sin resolver para después, otro momento. Ahora, me dispongo a hacer de este recién inaugurado 2010 un año mejor para mí.